Actividad física y alimentación en adolescentes y su influencia en el rendimiento académico

Abstract

Introducción: la práctica de actividad física y una alimentación saludable son hábitos imprescindibles para la salud física y mental de las personas. En consecuencia, ambas podrían manifestar asociaciones con el rendimiento académico (RA), convirtiéndose en elementos necesarios en un período tan delicado como la adolescencia. En cambio, aunque es imprescindible alcanzar las recomendaciones mínimas de actividad física y adecuar la ingesta de alimentos a unos patrones adecuados, como puede ser el patrón de alimentación mediterráneo, los niveles de ambas variables siguen siendo muy bajos en la actualidad en gran parte de los países desarrollados del mundo. Metodología: la presente investigación se ha realizado mediante un diseño cuasi-experimental, de carácter transversal. Ha sido llevada a cabo con un total de 844 adolescentes de entre 11 y 18 años (M = 14.87; DT = 1.73), de los cuales el 48.6% son hombres y el 51.4% mujeres, y pertenecientes a los cursos de 1o de ESO a 2o de Bachillerato de cinco centros educativos situados en diferentes ayuntamientos gallegos. Los datos recogidos fueron de carácter sociodemográfico, antropométrico y académico, y también acerca del nivel de actividad física (AF) y de la adherencia a la dieta mediterránea (DM) de los participantes. Los instrumentos utilizados fueron un cuestionario ad hoc de datos de elaboración propia, el cuestionario PAQ-A sobre AF y el cuestionario KIDMED sobre adherencia a la DM. Todos los cálculos han sido realizados mediante el paquete estadístico SPSS Statistics Versión 25. Resultados-conclusiones: se observan bajos niveles de AF, hallándose mayores niveles en los hombres, los sujetos que practican deporte y los sujetos de menor edad. Así mismo, se constatan valores intermedios de adherencia a la DM, mostrando mayores niveles aquellos sujetos que practican deporte estructurado, los estudiantes del medio urbano y los sujetos de menor edad. Se observó una correlación negativa entre el índice de masa corporal (IMC) y la AF, no hallándose la misma correlación entre IMC y DM. Se observa correlación entre el nivel de la adherencia a la DM y el RA, pero no entre AF y RA. El IMC correlacionó de forma inversa con el RA.