La poètica del buit en Víctor Sunyol

Resumo

Como se sabe, convencionalmente hablando, la literatura occidental ha tendido a menudo a realizarse en el espacio pleno del negro de la letra, ha tratado de construirse un sentido en la sustancia y consistencia de la palabra. ¿Pero qué pasa cuando la palabra ha perdido su prestigio, cuando el fin de los grandes relatos y la degradación y el descrédito del lenguaje han hecho casi inviables el propio ejercicio de la literatura? Con la categoría taxonómica «poética del vacío» (dicho sea singularis pro plurali) queremos dar cuenta de toda una serie de prácticas que, aproximadamente desde el último tercio del siglo XX hasta la actualidad, han hecho de la crisis del lenguaje y de su consiguiente silencio un espacio literario propio, el punto de partida de un lenguaje cuyo uso poético y crítico piensa y habla del conflicto como conflicto y, por lo tanto, en (el) conflicto. La dificultad a la que se enfrentan estas prácticas no es la del silencio precisamente, y de ahí la noción de vacío que se propone para diferenciarlas, ya que la crisis es la razón de su existencia, una razón negativa que las lleva, sin embargo, a la afirmación de un lenguaje también en crisis, a la dificultad de pensar y hablar no de sino en y desde la dificultad misma. En el marco de un discurso que ya no hace del silencio un decir –phoné– sino una escritura –gramma–, el poeta del vacío se afana por situarse en el espacio neutro de un entre, en el intersticio de silencio y palabra de una escritura que mantiene tensas y conflictivas las relaciones con la realidad (y con ello su carácter ético y político), de lenguaje siempre abierto, a la procura de un centro vacío y desértico, en tránsito permanente y orientada a la nada de su propia existencia. Es en este marco en el cual estudiamos la poética o los «ensayos de poética» de Víctor Sunyol (Vic, 1955) como aquellos que hablan justamente en la frontera de su decir y hacen del silencio, no un tema, sino el lugar y la acción del discurso. Como se explicita en la primera parte del trabajo, en la que se construye y se justifica la propia denominación «poética del vacío», el espacio vacío o silente del blanco de la página deviene en estas prácticas un nuevo centro de atención, no como un objeto de discurso (romanticismo-simbolismo) o como su provocadora subversión (vanguardias históricas); sino como el lugar en el cual es todavía posible decir. A partir de un recorrido por los momentos clave de la obra de Víctor Sunyol, el presente estudio analizará, en la segunda parte del trabajo, la singular propuesta de la poética sunyoliana, atravesando el motivo de la muerte como experiencia de un vacío en el «referente» en Ni amb ara prou de 1984; en el «sujeto» y la «obra» en El buit i la novel·la i Cap a Tirèsies de 1994 y 1997; en la «palabra» en Stabat de 2003; y, finalmente, en la propia «lengua» en Des d’ara de 2005; todas ellas experiencias de la nada de un lenguaje que, asumiendo «en carne propia» el no ser que lo constituye, trata de «ser donde no ser» (Birnam, 2015), es decir, no de hablar o callar delante de lo que no puede decir, sino de hacer del silencio un no-decir, el acto afirmativo de una escritura que escapa constantemente a todo patrón dicotómico.