Efecto de la recombinación de segmentos genómicos de betanodavirus en la adaptación del virus a su huésped
- Isabel Bandin Matos Doktormutter
Universität der Verteidigung: Universidade de Santiago de Compostela
Fecha de defensa: 27 von November von 2015
- Juan José Borrego García Präsident/in
- Juan Luis Barja Pérez Sekretär
- Félix Acosta Arbelo Vocal
- Dolores Castro López Vocal
- Sven Bergmann Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
En este trabajo se estudian los factores implicados en la patogénesis de cepas recombinantes de betanodavirus en lenguado y rodaballo. Los betanodavirus (familia Nodaviridae) son los virus causantes de la necrosis nerviosa viral (VNN), una de las enfermedades virales más serias que afecta a larvas y juveniles de numerosas especies de peces marinos en todo el mundo. Su genoma está formado por dos moléculas de ARN monocatenal ARN1 y ARN2 que codifican la polimerasa viral y la proteína de la cápside (Cp), respectivamente. La clasificación de estos virus en base a su ARN2 incluye 4 genotipos: Redspotted grouper nervous necrosis virus (RGNNV), Tiger puffer nervous necrosis virus (TPNNV), Barfin flounder nervous necrosis virus (BFNNV) e Striped jack nervous necrosis virus (SJNNV). Sin embargo, en los últimos años se detectaron en el sur de Europa un número significativo de virus recombinantes de tipo RGNNV/SJNNV aislados de lenguado. Estos aislados presentaban una cápside SJNNV con ligeras modificaciones compartiendo las sustituciones 247 y 270 localizadas en el extremo carboxilo-terminal de la Cp, una región relacionada con la especificidad de huésped en betanodavirus. En este trabajo se realizaron infecciones experimentales empleando distintos aislados de betanodavirus y cepas recombinantes obtenidas a partir de un sistema de genética inversa. Los resultados mostraron que el lenguado presenta una gran susceptibilidad a estos virus y que las posiciones 247 y 270 juegan un papel muy importante en la virulencia. Asimismo, se demostró la existencia de transmisión horizontal en esta especie y se observó una infección persistente en peces asintomáticos a 16 °C, pudiendo reactivarse el virus y causar enfermedad cuando se incrementa la temperatura. El rodaballo se mostró moderadamente susceptible a estos virus. Por último, se puede concluir que la temperatura es un factor muy importante para el control de la infección en las dos especies estudiadas.