Geografía de la identidad en la obra de Katherine Mansfield

  1. López Pérez, Ana Belén
Dirixida por:
  1. Jose Manuel Barbeito Varela Director

Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela

Fecha de defensa: 17 de xuño de 2013

Tribunal:
  1. Dario Villanueva Prieto Presidente
  2. Manuela Palacios González Secretaria
  3. María Lozano Mantecón Vogal
  4. Aránzazu Usandizaga Sáinz Vogal
  5. Ulrika Maude Vogal
Departamento:
  1. Departamento de Filoloxía Inglesa e Alemá

Tipo: Tese

Teseo: 328603 DIALNET

Resumo

Resumen La presente tesis doctoral presenta la geografía de la identidad que Katherine Mansfield creó en sus relatos. El punto de partida es una cita del año 1908 sobre el relato de Walter Pater ¿The Child in the House¿ en la que ella sintetiza todos los objetivos que se había propuesto como escritora. Allí aparecen los elementos de su obra más relevantes para el presente estudio: la identidad, los personajes femeninos, la raza, el colonialismo o la clase social, los espacios, y en relación con todo ello, la técnica narrativa o el género literario. Esta tesis se estructura en dos partes precedidas de un capítulo metodológico dedicado a la aproximación espacial al problema de la identidad. Después de una visión panorámica, me centro en la ¿teoría queer¿ de Judith Butler que ayuda a comprender tanto la perspectiva espacial como la noción del sujeto de Mansfield. El tratamiento del espacio y de la identidad contribuyen a situarla en el movimiento modernista del que la crítica la excluyó hasta no hace mucho tiempo. Las dos partes que vienen a continuación están dedicadas a la revisión de la construcción de la identidad de Mansfield por la recepción de su figura y obra y al estudio del problema de la identidad en su obra desde una perspectiva espacial. La primera parte se fundamenta en las posiciones teóricas de la estética de la recepción de Hans Robert Jauss y Wolfgang Iser, en la teoría empírica y en la teoría de los polisistemas. En ella se hace un repaso de la diversidad de aproximaciones críticas organizado en etapas que muestran la evolución de la recepción de la autora, recepción siempre condicionada por los imperativos de mercado en distintas circunstancias históricas. La necesidad de este análisis viene determinada por la complejidad de una tradición crítica que hizo de la identidad de la autora su centro neurálgico: cuestiones tales como el género de la autora, su procedencia colonial, sus circunstancias y relaciones personales o la muerte a edad temprana se convirtieron en los temas dominantes de la crítica. Además, el estudio de la recepción muestra precisamente la imperante necesidad de realizar un acercamiento a la obra de Mansfield desde una perspectiva espacial como alternativa a la temporal que fue usada mayoritariamente a lo largo del siglo XX. En la segunda parte de la tesis se analizan los relatos de Mansfield desde una perspectiva espacial. Este análisis espacial tiene como objetivo mostrar la geografía de la identidad creada por la autora. Los capítulos dedicados al análisis de los relatos van precedidos de una reflexión sobre la relación entre el espacio y la identidad. El apartado ¿Una aproximación espacial al estudio de la identidad¿ da cuenta del paso del enfoque temporal al espacial adoptado recientemente y del creciente interés por la perspectiva de género escasamente atendido en el pasado, así como de las razones que motivaron este cambio perspectiva. En algunas disciplinas como la geografía, la arquitectura o las artes visuales la necesidad de la atención al espacio parece obvia, aunque el interés por el estudio del género en relación con el espacio es menos común; por eso atiendo a la geografía feminista, particularmente el estudio de Linda McDowell (Género, identidad y lugar) y a los estudios feministas de pintura como los debidos a Griselda Pollock. Por el contrario, en las disciplinas de historia, antropología, filosofía, psicoanálisis, fenomenología o sociología la perspectiva espacial no era tan común; sin embargo, resulta de interés ver los frutos de ese enfoque. Señalo ahí también los términos que pueden resultar problemáticos a la hora de comprender la identidad con una mirada espacial (el espacio en relación con el tiempo, el lugar, el lenguaje y la literatura) y abordo los distintos aspectos del tema en los relatos de Mansfield: cuerpo, casa, ciudad y espacios ¿no-cotidianos¿. El estudio espacial de la identidad en los capítulos dedicados al análisis de los relatos tiene dos ejes fundamentales: el cuerpo como espacio y los espacios físicos concretos en los que se mueven los individuos. El individuo localiza su subjetividad en su propio cuerpo que es determinante en su organización del espacio. Sigo aquí las teorías de Butler sobre el cuerpo como una superficie regulada por límites, usos sociales e ideológicos y las de Maurice Merleau-Ponty, Henri Lefebvre y Pierre Bourdieu que toman cuerpo como cualquier otro espacio humano (la casa, el campo, o la ciudad) en el que, al igual que en el cuerpo, se inscriben formas de poder relacionadas con el género, la raza, la clase social o la edad. Por todo esto, el estudio del cuerpo es imprescindible para abordar la cuestión de la identidad. Del cuerpo de los personajes de Mansfield interesan diversos aspectos estudiados en sus correspondientes apartados: la alimentación, asociada a cuestiones relacionadas con la nacionalidad, la clase social y el género; la enfermedad, que fuerza un desplazamiento espacial y una cierta pérdida de la identidad masculina o femenina; la maternidad, que conlleva con frecuencia un aislamiento espacial; la sexualidad, que es vivida de forma desigual por los personajes femeninos de distintas edades; o el envejecimiento, que suscita también una especial relación con el espacio, particularmente en el caso de las mujeres. Después del análisis de estos aspectos de los relatos tanto en los personajes masculinos como femeninos, atiendo a los espacios físicos en que estos se mueven. Se aborda primero el espacio de la casa porque es habitualmente el primer escenario de identidad del individuo y con el que se identifica, tal y como destacó Sigmund Freud. El análisis de este espacio primario y básico en el desarrollo de la identidad individual muestra su enorme complejidad. Partiendo del estudio clásico de Gaston Bachelard, La poética del espacio, defiendo que la casa es un espacio característico del Modernismo, aspecto ya resaltado por los recientes estudios de Christopher Reed o Morag Shiach. Su vinculación con la identidad se presenta en tres ejes diferentes. Siguiendo los estudios de Sandra Gilbert, Susan Gubar y de Iris Marion Young, analizo primero la ambivalencia de la casa ¿ el espacio tradicionalmente natural de la mujer ¿ en relación con los personajes femeninos para quienes esta se revela como un espacio opresor y liberador a la vez; la clase social y el colonialismo son aspectos decisivos a tratar en relación con este punto. A continuación me ocupo de la identidad de los personajes masculinos para quienes la casa es un espacio igualmente complejo y en su caso reflejará personalidades envanecidas o anuladas de hombres que son, en ambos casos, débiles e inseguros. Finalmente, estudio la casa como el espacio de construcción de la identidad de niños y niñas y tomo de nuevo en cuenta las teorías de Judith Butler y otros críticos como Iris Marion Young sobre el origen de la identidad personal. El enfrentamiento de los personajes infantiles al espacio de la casa en los relatos de Mansfield se muestra particularmente complejo y suele precisar una especie de desplazamiento entre estratos centrales y periféricos, a veces en términos de clase social. En el capítulo 7 me ocupo de la ciudad, tradicionalmente asociada a la masculinidad, y de los problemas que por ello plantea desde la perspectiva del género. En la aproximación al espacio urbano en la relación con la identidad, aunque me centro en la coordenada de género, analizo también la de clase social y nacionalidad, importantes en la concepción de modernidad de la ciudad, aspecto en el que Mansfield se aproxima a escritores contemporáneos. Parto aquí de los presupuestos teóricos de Henri Lefebvre, Elizabeth Grosz, Fran Tonkiss y otros críticos, como Deborah L. Parsons, que estudian la figura de la mujer en el espacio urbano. Las ciudades de los relatos de Mansfield son las mismas en las que ella vivió durante períodos de tiempo más o menos prolongados: Londres, París y una pequeña ciudad neozelandesa sin nombre que podría identificarse con Wellington. Se analiza primero el espacio urbano en relación con los personajes masculinos, por ser tradicionalmente el espacio de su actividad, y se muestra el modo en que se mueven y posicionan allí tanto el páter familias, responsable del mantenimiento de su prole, como otros personajes solitarios que carecen de esa responsabilidad. Es también el espacio de los intelectuales con los que Mansfield se mostró tremendamente crítica, dejando constancia de su actitud hacia ellos en algunos personajes de los relatos y en sus escritos personales. A continuación se analizan los personajes femeninos para quienes la ciudad es, en principio, un espacio mucho más complejo y conflictivo que para los hombres. El último apartado del estudio de la identidad en los relatos de Mansfield se ocupa de lo que denomino ¿espacios no-cotidianos¿, concepto que comparte cualidades de los ¿espaces autres¿ de Michel Foucault y de los ¿no-lugares¿ de Mar Augé. Se trata de espacios que los individuos ocupan de modo transitorio y que tienen sus propias normas de funcionamiento: balnearios, hoteles y barcos. Estos fueron parte de la experiencia vital de Mansfield quien, por su enfermedad, se vio vinculada a ellos. El análisis de estos espacios no cotidianos y de otros que, aunque normalmente cotidianos, se convirtieron en extraordinarios en ciertos momentos, como durante la guerra, mostrará cómo en ellos se altera la posición tradicional de hombres y mujeres y cómo esto afecta a su identidad. En las conclusiones generales sintetizo la completa y compleja geografía de la identidad que presenta la obra Katherine Mansfield y las ventajas de la aproximación a la misma desde una perspectiva espacial. La bibliografía está organizada en fuentes primarias y fuentes secundarias. La bibliografía secundaria se clasifica según los principales ejes de la tesis: estudios sobre Katherine Mansfield, sobre la identidad y el espacio, sobre el Modernismo, sobre el relato breve y finalmente sobre la recepción. La tesis se cierra con un apéndice de ilustraciones a las que me refiero a lo largo del estudio.