La poesía burlesca de Quevedo y sus modelos italianos
- CACHO, RODRIGO GABRIEL
- Alfonso Rey Álvarez Director
Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela
Fecha de defensa: 24 de xuño de 2003
- Luis Iglesias Feijoo Presidente
- Antonio Azaustre Galiana Secretario
- José María Micó Vogal
- Alessandro Martinengo Vogal
- Ignacio Arellano Ayuso Vogal
Tipo: Tese
Resumo
La poesía burlesca de Quevedo asimila los aspectos, recursos y temas más destacados de este género en la literatura del Siglo de Oro y lo lleva a su culminación. En sus versos se instaura un diálogo abierto con las tradiciones clásica, hispana e italiana, en un proceso creador basado fundamentalmente en el uso rico y original de la imitación poética, práctica que estaba en la base de la concepción literaria de la época. Por tanto, las raíces de las poesía jocosa de Quevedo parten de unos modelos previos que el escritor sigue, manipula y combina. Los antecedentes más destacados han de buscarse en obras como la Antología griega, los epigramas de Marcial, los poemas de Horacio, las sátiras de Persio y Juvenal, la sección de "obras de burlas" del Cancionero general, y los poemas satíricos y burlescos españoles del siglo XVI y contemporáneos a Quevedo. Junto con estos textos, debería tenerse en cuenta también la tradición literaria italiana, que supuso un punto de referencia constante para los escritores españoles de los siglos XVI y XVII, y especialmente para el autor del Buscón. Su dominio de la lengua italiana y su cultura humanística le facilitaron el acceso a estas fuentes. El objeto principal de este trabajo es, pues, la investigación de las relaciones entre la poesía satírica y burlesca italiana y la de Quevedo: recrear un modelo literario y ponerlo en relación con Quevedo, delimitar lo que asimiló, cómo lo hizo y, también, todo lo que rechazó y por qué. Se puede profundizar así en el conocimiento del arte literario de Quevedo y de sus prácticas de lectura y reescritura. Los modelos literarios de Quevedo son manipulados y sometidos a los principios creadores del Barroco. Entre ellos, la tradición italiana ocupa un lugar muy destacado. En sus versos jocosos imita este precedente demostrando conocerlo en profundidad. Pese a que se trate de unos textos que tuvieron gran difusión en el Siglo de Oro,